MÉTODOS DE EVALUACIÓN DE LA INSULINA Y LA RESISTENCIA A LA INSULINA
En este artículo voy a realizar un pequeño repaso sobre los diferentes métodos de evaluación con los que medir la Resistencia a la Insulina y veremos los pros y los contras.
Comenzaremos viendo cómo evaluar la insulina en el organismo, para después poder valorar la Resistencia a la insulina.
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- El primer marcador que veremos es el nivel sérico de insulina. Este método no es preciso ya que la insulina tiene una secreción pulsátil, un tiempo de vida corto (6 minutos) y además depende de la depuración hepática.
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- Otro marcador, es la valoración del Péptido C (marcador de la producción de insulina). Esta proteína es producida junto a la insulina, pero a diferencia de ella se depura solamente en los riñones y no en el hígado, por lo que pasa el 100% por toda la circulación del organismo. Es interesante saber que el péptido C, estabiliza la molécula de insulina cuando está almacenada en las células beta y se llama “Proinsulina” y no tiene actividad biológica. Otra ventaja de esta molécula es que tiene un tiempo de vida medio (30 minutos), no sufre la influencia de los anticuerpos de anti insulina o de la insulina exógena. Y por lo tanto podríamos decir que es la prueba estándar para evaluar la secreción de la insulina.
Por todo ello para evaluar la producción de insulina no cuantificamos la insulina sino el péptido C. Aunque su utilización para evaluar la RI aún está poco documentada.
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- También existe otro método, pero que solo se utiliza para estudios científicos por la complejidad que representa. En este caso, estoy hablando del CLAMP euglucémico-hiperinsulinémico, es una prueba con una duración de 1 hora y el objetivo es tratar de mantener la glucemia en ayunas mientras se introduce una infusión intravenosa constante de insulina en un brazo. También se la conoce como «estándar de oro» de los métodos que cuantifican la sensibilidad a la insulina in vivo.
Todos estos métodos descritos son directos y ahora pasaré a recoger los métodos indirectos, que serán los siguientes:
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- Comenzaré con uno que se oye mucho y es el HOMA (Homeostasis Model Assessment), es un modelo matemático tanto para la evaluación de la Resistencia a la Insulina como para la producción de insulina. Una glucemia o insulina elevada nos sugiere que existe Resistencia a la Insulina. Pero tenemos que tener en cuenta una cosa, este dato nos mostrará la resistencia a la insulina hepática y presupone que la resistencia a la insulina periférica es igual. Pero ojo no tiene porque serlo, si el hígado no depura correctamente. Este método posee dos ecuaciones matemáticas:
HOMA-BETA = 20 x Insulina (µU/ml) / glucemia (mmol/l) – 3,5
HOMA-IR= insulina (µU/ml) x glucemia (mmol/l) / 22,5
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- Otro método es el QUICKI (Quantitative Insulin sensitivity Check Index), es un índice cuantitativo de verificación de la sensibilidad a la insulina. Posee la misma base conceptual que el HOMA-IR, pero necesita un cambio logarítmico en su fórmula matemática que dificulta su utilización.
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- El siguiente método es el Índice TyG, es un índice muy interesante ya que no utiliza insulina en ayunas en su cálculo. Sino que hace uso de la glucemia y los triglicéridos en ayuna. La resistencia la insulina produce una reducción de la acción antilipolítica en los adipocitos, esto aumenta el flujo de ácidos grasos hacia el hígado y se produce un mayor contenido de triglicéridos hepáticos, aumentando así los niveles de VLDL y triglicéridos en ayuna. Es el primer índice que no utiliza la insulina en ayuna. Pero nos ocurre lo mismo que con el método anterior, es necesario un cambio de logaritmo neperiano que dificulta su utilización.
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- Y por último está el método HOMA-2, que es un modelo computacional creado por la Universidad de Oxford que actualiza el método HOMA original. Un punto importante es que en el programa puedes introducir 3 sustratos para realizar el cálculo: insulina, péptido-C y la insulina específica (insulina libre, no proinsulina). Siendo el péptido-C un dato que nos muestra toda su secreción en sangre, ya que este no se depura en el hígado.
Este método lo bueno que tiene es que corrige la superestimación del HOMA y permite la utilización del péptido-C.
Para finalizar podemos hacer un resumen de las ideas para que nos quede más claro:
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- La forma más común de detectar y cuantificar la resistencia a la insulina es la hiperinsulinemia compensatoria.
- El CLAMP, es la prueba “gold standard” pero todavía no está disponible para todos los públicos; solo para estudios científicos.
- HOMA, hace uso de la glucemia y la insulina en ayunas y con él podríamos evaluar la resistencia a la insulina hepática.
- El QUICK, evalúa la sensibilidad a la insulina, utilizando la glucemia y la insulinemia. Aunque no existen puntos de corte bien definidos.
- Índice TyG, este es el primer índice que no utiliza insulina, utiliza triglicéridos. Pero tampoco posee puntos de corte bien definidos.
- HOMA-2, es la prueba más certera ya que se calcula a partir de tres sustratos como son el péptido-C, la insulina y la insulina específica.
Tras todo esto, algo que debemos tener muy claro es que siempre será necesaria la reevaluación de la resistencia a la insulina a lo largo del tiempo, como puede ser tras la realización de alguna intervención dietética, cambio de estilo de vida o intervención quirúrgica. Ya que a día de hoy, no hay un método de investigación que cumpla con todos los criterios, y se pueda usar y aplicar universalmente.