En ella se realizará una valoración del estado nutricional del paciente, donde se evaluarán todos sus factores individuales (enfermedades, fármacos y suplementos que ingiere, mediciones antropométricas y valoración bioquímica). A partir de aquí se realizará una pauta dietética completamente personalizada y adaptada a las patologías si las hubiera.
También aprenderemos a cambiar hábitos alimenticios no saludables y a crear una adherencia de estos hábitos tras la finalización del tratamiento.